#ElPerúQueQueremos

tomado de "El ermitaño : Historia de una invasión". Editado por proceso social (1985)

La leyenda de "El  ermitaño"

Un homenaje al barrio que me vio crecer

Publicado: 2016-03-15


Cuentan las buenas lenguas, que en una choza, vivía un hombre de mirada triste, frente cansada, cabello desordenado y barba crecida. Sobre todo, de comportamiento extraño. ÉL no hablaba con nadie, solamente se acercaba a las personas para pedirles comida. Luego, regresaba al rincón donde se hallaba su pobrísima y solitaria choza, que de vez en cuando la arreglaba. A pesar de tener escaza comunicación con otros, era amigo de la paz. Por eso, no se atrevían a molestarlo. Y, como no conocían su nombre, le comenzaron a llamar “El ermitaño”. Pasaron los años y nunca más se supo de él.

Hasta que, por el año de 1960, cuando la gente de la sierra comenzó a dejar sus casas y chacras, partiendo a la ciudad de Lima en busca de mejores oportunidades.

Fue entonces, que con el único propósito de tener un espacio donde vivir, se organizaron. Y, un 7 de junio de 1962 a las 7 de la noche, muchas familias que vivían en cuartos alquilados o en casas de sus parientes, decidieron invadir la pampa y faldas de los cerros. Pampa donde vivió el ermitaño y gracias a ese apodo la comunidad lleva su nombre.

Ese pueblo ubicado en la zona norte de la ciudad de Lima, capital del Perú, nada tiene de aislado y solitario. Más bien, se ha superpoblado y en la actualidad vienen experimentado un proceso de tugurización.


Escrito por

Roxana Hoces Montes

Educadora independiente.


Publicado en

El jardín de la luna

Una chispa de luna para proponer temas relacionados a las diversas formas de comunicar.